28 de marzo, día de San Sixto III, papa
Acontecimientos literarios ocurridos en 28 de marzo
Nacieron:
La escritora, monja y santa española Teresa de Jesús (1815); el escritor y comediógrafo español Ramón de la Cruz (1731); la maestra, escritora e inventora española Ángela Ruiz Robles (1895); el escritor y político peruano, premio Nobel de Literatura en 2010, Mario Vargas Llosa (1936); el poeta español Julio Llamazares (1955); la actriz, escritora y presentadora colombiana Isabella Santodomingo (1968) y la escritora española Cristina Cerrada (1970).
Fallecieron:
El escritor español José María Salaverría (1940); el poeta y dramaturgo español Miguel Hernández (1942); el escritor y político argentino Hugo Wast, seudónimo de Gustavo Adolfo Martínez Zuviría (1962) y el marino, escritor y periodista español Isidoro Valverde Álvarez (1995).
Y hablamos de Hugo Wast, que falleció tal día como hoy, 28 de marzo, del año 1962
Hugo Wast (Gustavo Adolfo Martínez Zuviría) es el protagonista de estas efemérides de hoy. Fue una figura destacada de la literatura, la política y el pensamiento conservador argentino. Nacido en Córdoba el 23 de octubre de 1883, se formó como abogado en la Universidad de Santa Fe y desde joven mostró una inclinación por las letras. Su carrera literaria comenzó en 1911, cuando publicó Flor de Durazno.
La obra de Wast se caracteriza por su enfoque en temas sociales y espirituales, así como por su adhesión a una visión cristiana del mundo. Su pensamiento estuvo marcado por el conservadurismo católico de los valores tradicionales frente a las corrientes liberales y progresistas. En sus escritos y en su vida pública abogó por la preservación de la identidad cultural argentina basada en el catolicismo y en una moral estricta. Fue crítico del liberalismo político y económico, así como del comunismo, al que consideraba una amenaza para los valores cristianos. Su postura ideológica lo llevó a admirar figuras como Francisco Franco en España, lo que refleja su afinidad con movimientos nacionalistas y tradicionalistas. O sea, un hombre cabal.
Su carrera política fue tan relevante como su producción literaria. Entre 1916 y 1920 fue diputado nacional, pero su mayor influencia llegó desde que fue nombrado director de la Biblioteca Nacional (1931-1955), cargo que ocupó hasta 1955. Durante su gestión, promovió la difusión de obras literarias afines a sus ideales religiosos y nacionales. Además, entre 1943 y 1944 ejerció como ministro de Justicia e Instrucción Pública durante el gobierno militar liderado por Pedro Pablo Ramírez. En este rol impulsó la reintroducción de la educación religiosa en las escuelas públicas argentinas, rompiendo con décadas de enseñanza secular. Esta decisión generó tanto apoyo entre sectores conservadores como críticas desde ámbitos más progresistas.
Su obra
Wast fue uno de los autores más populares de su tiempo. Publicó más de treinta libros que alcanzaron una notable difusión no solo en Argentina sino también en otros países. Sus novelas solían abordar temas relacionados con la historia argentina, los conflictos sociales y las luchas internas del ser humano desde una perspectiva cristiana. Entre sus obras más destacadas figuran la citada Flor de Durazno; La Casa de los Cuervos y Desierto de piedra, que recibió el Gran Premio Nacional de Literatura Argentina.
Sin embargo, no toda su obra estuvo exenta de controversias. Hugo Wast fue acusado de antisemitismo debido a ciertos pasajes presentes en su novela Oro, donde se retrata a personajes judíos bajo estereotipos negativos. Esta estupidez de los que hoy en día portan banderas de Palestina, es solo una más de sus hazañas intelectuales, hipócritas y ajenas a cualquier pensamiento hilado y humano. Cosas de la progresía, que no suponen ninguna novedad, ni en la época de Wast ni ahora.
Hugo Wast falleció en Buenos Aires, el 28 de marzo de 1962, a los 78 años de edad.