Analizamos hoy a la titular del sillón «P». Bienvenida, Inés Fernández-Ordóñez, a Académicos RAE.
Inés Fernández-Ordóñez. Entorno y formación
Nació en Madrid el 17 de diciembre de 1961. Pertenece a una familia destacada en los ámbitos político y cultural: es hija de José Antonio Fernández-Ordóñez y sobrina de Francisco Fernández Ordóñez y Miguel Ángel Fernández Ordóñez. Se formó en Filología Hispánica en la Universidad Autónoma de Madrid y amplió estudios en universidades europeas como Bielefeld, París y Cambridge.
Actividad profesional
Es doctora en Filología Hispánica y catedrática de Lengua Española en la Universidad Autónoma de Madrid. Su especialidad es la dialectología del español, tanto actual como histórica, con especial atención a la variación gramatical. Dirige desde 1990 el Corpus Oral y Sonoro del Español Rural (COSER), un ambicioso proyecto de documentación lingüística rural. Además, ha realizado ediciones críticas de textos medievales y estudios sobre la evolución de los sistemas pronominales en español (leísmo, laísmo, loísmo), así como investigaciones sobre textos históricos y cronísticos, especialmente los patrocinados por Alfonso X el Sabio. Es discípula de Diego Catalán y se inscribe en la tradición filológica de Ramón Menéndez Pidal.
Inés Fernández-Ordóñez en la RAE
Fue elegida académica de número de la Real Academia Española el 18 de diciembre de 2008, para ocupar el sillón «P» en sustitución de Ángel González, y tomó posesión el 13 de febrero de 2011 con un discurso titulado La lengua de Castilla y la formación del español al que contestó, en nombre de la institución, José Antonio Pascual.
Su candidatura fue la única presentada y la propusieron el citado José Antonio Pascual, Margarita Salas y Álvaro Pombo. Fue la mujer más joven en incorporarse a la RAE y la cuarta mujer académica de la institución, así como la primera filóloga en acceder a la Academia. Además, desde el 8 de enero de 2015 es vocal de la Junta de Gobierno, cargo para el que fue reelegida en 2016.
Fernández-Ordóñez es reconocida por su rigor investigativo y su defensa de una visión del español como resultado de la fusión de varias lenguas peninsulares, no solo del castellano. Su trayectoria y aportaciones la sitúan como una de las figuras más relevantes en la filología hispánica y la lingüística española contemporánea.