Continuamos esta sección de Académicos RAE con un filólogo clásico y medievalista: Juan Gil Fernández.
Los inicios de Juan Gil
Nacido en Madrid en 1939, su vida ha estado marcada por una dedicación incansable al estudio y la docencia, así como por una curiosidad intelectual que lo ha llevado a indagar en los rincones más complejos de la historia, la lengua y la cultura hispánica. Su formación se inició en la Universidad Complutense de Madrid, donde obtuvo la licenciatura en Filosofía y Letras y el Premio Extraordinario y culminó con un doctorado en la Facoltà di Lettere de Bolonia, galardonado con el Premio Luigi Jacopini.
Su actividad
Desarrolló su carrera principalmente en la Universidad de Sevilla, donde fue catedrático de Filología Latina desde 1971 hasta su jubilación en 2006, aunque también ejerció como profesor en la Complutense y en el Instituto Beatriz Galindo de Madrid. Juan Gil ha sido pionero en el estudio del latín tardío y medieval en España, con especial atención al latín visigótico y mozárabe, campos en los que su Corpus scriptorum Muzarabicorum es obra de referencia internacional. Su erudición abarca desde la crítica textual y la edición de clásicos (como Jenofonte y Horacio), hasta el análisis de las minorías religiosas, la historia de la Inquisición y la expansión europea, con especial énfasis en la figura de Cristóbal Colón y el descubrimiento de América.
Es un defensor apasionado de la importancia del latín y del griego para entender la cultura española y europea.
La producción científica de Juan Gil es abrumadora: más de 300 trabajos y numerosos libros que han renovado el conocimiento sobre la literatura latina de la Edad Media y el Renacimiento, la historia de los conversos y la Inquisición sevillana (en una monumental obra de ocho volúmenes) y la edición crítica de textos fundamentales para la historia y la cultura hispánica. Su rigor filológico se combina con una mirada humanista, capaz de tender puentes entre la filología, la historia y la antropología cultural. Ha colaborado con investigadores de todo el mundo y está reconocido con distinciones como el doctorado honoris causa por la Universidad Complutense y el Premio Manuel Clavero.
La «e» de Juan Gil en la RAE
El 5 de mayo de 2011, los miembros de la Real Academia Española eligieron a Juan Gil académico de número. Tomó posesión el 30 de octubre del mismo año ocupando la silla «e», vacante tras el fallecimiento de Miguel Delibes. En su discurso de ingreso, titulado El burlador y sus estragos, rindió homenaje tanto a la tradición literaria como al rigor filológico, abordando la figura de don Juan y sus raíces en la literatura clásica. La bienvenida en nombre de la corporación se la dio Francisco Rodríguez Adrados, en una ceremonia que subrayó la relevancia de la filología latina.
La entrada en la RAE supuso, así, el reconocimiento institucional a una trayectoria ejemplar. Desde entonces, Juan Gil desempeña un papel relevante en la vida académica de la RAE, llegando a ser vicesecretario de la Junta de Gobierno.