Tonto, feo, malo, ¡negacionista!

Tonto, feo, malo, ¡negacionista!

Exordio Ya disculparán ustedes (o no) el tono del titular de este artículo: Tonto, feo, malo, ¡negacionista! es, solo, una reducción al absurdo de las muchas estupideces que se dicen por ahí y que las gentes toman como magisterio de la verdad única y como dogma de una...