¿Qué fue el Congreso de Angostura? La génesis política de la Gran Colombia.
El 15 de febrero de 1819, en la ciudad de Santo Tomás de Angostura —hoy Ciudad Bolívar (Venezuela)— se instaló una de las asambleas más decisivas de la historia hispanoamericana: el Congreso de Angostura. Convocado por Simón Bolívar en el contexto de las guerras de independencia de Venezuela y Colombia, este congreso no fue un gesto simbólico ni una reunión de circunstancia. Fue el intento más serio de dotar de estructura política y legitimidad jurídica a los territorios liberados del dominio español.
Bolívar, consciente de que la lucha armada requería un respaldo institucional, reunió a treinta diputados provenientes de las provincias de Caracas, Barcelona, Barinas, Cumaná, Guayana, Margarita y Casanare. La presidencia del Congreso recayó en Francisco Antonio Zea, y la secretaría en Diego Bautista Urbaneja. El lugar elegido fue la Casa del Congreso, una casona colonial frente a la actual Plaza Bolívar, que se convirtió en epicentro de deliberaciones que marcarían el destino de millones.
El Discurso de Angostura: palabra fundacional
En la sesión inaugural, Bolívar pronunció su célebre Discurso de Angostura, una pieza oratoria que no solo delineó los principios de la nueva república, sino que trazó una visión moral, educativa y política para América. Dichoso el ciudadano que bajo el escudo de las armas de su mando ha convocado la soberanía nacional para que ejerza su voluntad absoluta, dijo Bolívar, reconociendo que la autoridad legítima no reside en el caudillo, sino en el pueblo representado.
El discurso no fue una exaltación bélica, sino una reflexión sobre el tipo de república que debía fundarse. Bolívar propuso un sistema presidencialista, con un poder ejecutivo fuerte pero limitado por la ley y un legislativo bicameral. Elogió los modelos de Gran Bretaña, Francia y Estados Unidos, pero advirtió que América debía encontrar su propio camino, adaptado a sus realidades sociales y culturales.
Nacimiento de la Gran Colombia
El Congreso de Angostura no se limitó a proclamas. En sus sesiones se redactó la Ley Fundamental, base jurídica de la nueva nación. Se creó la República de Colombia —más tarde conocida como la Gran Colombia— que integraría los territorios de Venezuela, Nueva Granada (actual Colombia), Ecuador y Panamá. Bolívar fue elegido presidente y Francisco de Paula Santander, vicepresidente.
La nueva república rompía definitivamente con España, no solo en lo militar, sino en lo institucional. Se abolió la esclavitud, se promovió la educación como pilar de la ciudadanía y se sentaron las bases para una economía libre. El Congreso no fue una copia de modelos europeos, sino una construcción original, nacida del cruce entre ideales ilustrados y urgencias americanas.
Congreso de Angostura. Legado y vigencia
El Congreso de Angostura culminó en 1821, cuando sus resoluciones fueron consolidadas en el Congreso de Cúcuta. Pero su legado permanece. Fue el primer intento serio de construir una república continental, con visión integradora y vocación democrática. Bolívar no buscaba una independencia fragmentada, sino una unidad política que evitara el caos y la dispersión.
Hoy, el Congreso de Angostura representa el momento en que la espada cedió espacio a la palabra y la guerra dio paso al derecho. Fue el acto fundacional de una república que, aunque efímera en su forma original, dejó una huella indeleble en la historia de Hispanoamérica.