Hay palabras que nos recuerdan que hablan de una historia compartida, y que con sus conexiones, no se detuvieron ni por el tiempo ni por las fronteras. Son las que nos invitan a reflexionar sobre los indudables enlaces entre los idiomas modernos. Una de estas es la que vamos a abordar ahora: la cognación. Además, claro, va a entrar en el cajón de palabras destinadas al rescate por falta de uso.
Cognación. Etimología
Es un fenómeno lingüístico que revela las intrincadas conexiones entre los idiomas, ofreciendo una ventana a la historia y evolución de las lenguas. Este concepto engloba palabras que comparten un origen común, generalmente provenientes del latín o el griego, y que mantienen similitudes en su forma y significado a través de diferentes idiomas.
Su origen es el latín cognātus, que significa nacido junto con o emparentado. Este término se forma a partir de la raíz co- (unión, compañía) y gnatus, participio del verbo gnasci (nacer). En su uso original, hacía referencia a personas con un vínculo de parentesco, es decir, aquellos que compartían un mismo origen o linaje.
Por otro lado, cognación deriva del latín cognatio, cognationis, que también aludía a un parentesco, especialmente por línea femenina. Este término combina cum (con) y natio (nacimiento).
Con el tiempo, ambos términos ampliaron su significado. En lingüística, cognado pasó a designar palabras en diferentes idiomas que comparten una raíz etimológica común, reflejando una especie de parentesco entre lenguas. Aunque en su origen estos términos estaban ligados a la biología y los vínculos familiares, su adaptación al ámbito lingüístico conserva la esencia de lo que significa estar emparentado: compartir un punto de partida común.
¿Qué son los cognados?
Son palabras en distintos idiomas que comparten una raíz etimológica, resultando en similitudes tanto en su ortografía como en su significado. Son amigos lingüísticos. Así, palabras como doctor, gratitude/gratitud y vulnerable son cognados entre el inglés y el español.
Sin embargo, no todo es tan sencillo en el mundo de la cognación. Los falsos amigos o falsos cognados son palabras que, a pesar de su aparente similitud, tienen significados diferentes en distintos idiomas. Un ejemplo clásico es la palabra embarazada en español, que no significa embarrassed (avergonzado) en inglés, sino pregnant. Estos falsos amigos pueden llevar a malentendidos cómicos o incluso embarazosos si no se manejan con cuidado.
Cognados en el mismo idioma
Un fenómeno interesante relacionado con la cognación son los dobletes léxicos, casos donde dos palabras cognadas coexisten dentro de una misma lengua. En español, por ejemplo, tenemos pares como:
- Obra y ópera, ambas derivadas del latín opera.
- Palabra y parábola, de parabŏla.
- Cátedra y cadera, de cathedra.
La cognación entre lenguas romances
Las lenguas romances, como el español, el francés, el italiano y el portugués, comparten un alto grado de cognación debido a su origen común en el latín. Se estima que el español y el francés, por ejemplo, tienen alrededor de un 70 % de similitudes. Esta proximidad lingüística facilita en gran medida el aprendizaje entre estas lenguas.
La comprensión de la cognación y sus variantes (cognados verdaderos, falsos amigos, dobletes) es crucial para los estudiantes de idiomas. Mientras que los cognados verdaderos pueden acelerar el aprendizaje de vocabulario, los falsos amigos requieren una atención especial para evitar errores de comunicación.