Es raro que alguna vez se me escape un ¡Bienvenido! al recibir a mis visitantes. Desde que se ha popularizado la costumbre de responder con un insalubre ¡Bien hallado!, esa expresión ha dejado de resultarme natural. Confieso que la respuesta me suena forzada, sin calidez, anticuada y muy cursi. Tanto es así, que prefiero evitar el saludo tradicional antes que enfrentarme a esa réplica que, lejos de devolver la bienvenida, me deja con la incómoda sensación de haber abierto la puerta a una fórmula vacía.
Bienvenido y bien hallado: etimología y significado
- Bienvenido proviene del latín bene venire (venir bien). Es una fórmula de cortesía para expresar complacencia o alegría por la llegada de alguien.
- Bien hallado es una expresión formada por bien y hallado (del verbo hallar, encontrar). Se utiliza como respuesta a bienvenido, para indicar que quien llega se alegra de haber encontrado a quienes le reciben.
Curiosidades y usos
- Bien hallado en el español actual suena a expresión arcaica o afectada y muchas personas prefieren responder simplemente gracias, con muy buen criterio.
- La concordancia de género y número en bien hallado genera confusión: debe concordar con el género y número de la persona que responde (es decir, quien llega), no con quien da la bienvenida. Así, si llega un hombre, responde: bien hallado. Si llega una mujer, responde: bien hallada.
- Según el diccionario oficial, únicamente se reconoce la expresión escrita en dos palabras: bien hallado, y nunca bienhallado.
Bien hallado: crítica
Bien hallado resulta forzado y poco natural en el español contemporáneo. Hallar es sinónimo de encontrar, pero su uso en la vida cotidiana es mucho menos frecuente y suena literario o anticuado.
Semánticamente, si alguien te da la bienvenida, lo natural sería agradecer, no afirmar que estás bien hallado, como si fueras un objeto perdido y por fin encontrado. Decir bien encontrado sería aún más extraño, pues en español no se usa como fórmula de cortesía.
Bien situado tampoco tendría sentido, ya que alude a la ubicación física o posición social, no a la interacción o el saludo.
¿Por qué es absurdo?
- La expresión bien hallado es un calco de la fórmula bienvenido, pero aplicada al revés. Sin embargo, carece de la naturalidad y espontaneidad de otras respuestas de cortesía.
- La idea de que quien llega se considere bien hallado es una construcción forzada y poco intuitiva: en la práctica, nadie piensa en sí mismo como un objeto encontrado por los anfitriones, sino como alguien recibido o acogido por ellos.
- El que la concordancia deba hacerse con el género y número de quien responde añade confusión y rigidez a su uso, alejándolo más del habla natural.
- En resumen, es una fórmula arcaica, innecesaria y absurda desde el punto de vista comunicativo: ni refleja el sentir espontáneo de quien llega, ni aporta claridad o calidez al intercambio. Un simple gracias cumple mucho mejor su función.
Y con un rotundo gracias, les doy la bienvenida a hablarydecir y a sus Dudas razonables (o no).
