Quizá ya lo sabía pero Clarín es el seudónimo que Leopoldo García-Alas (1852-1901) adoptó en su trayectoria literaria y su identidad como escritor.
Adoptó el seudónimo en 1875, cuando comenzó a colaborar con el periódico El Solfeo. El director pidió a sus redactores que eligieran nombres de instrumentos musicales para firmar sus artículos. Así, Leopoldo Alas eligió el nombre Clarín, que es un instrumento de viento, y lo utilizó por primera vez en su columna titulada Azotacalles de Madrid.
Clarín. Razones de la elección
Contexto musical. El nombre Clarín se relaciona con el deseo del director del periódico de que los colaboradores adoptaran seudónimos musicales, lo que le daba un carácter distintivo y acorde con la temática del medio.
Identidad literaria. Con este seudónimo, pudo establecer una identidad literaria que le permitió criticar de manera incisiva la situación política y social de su tiempo, especialmente durante la Restauración borbónica en España. Su estilo irónico y mordaz le ganó popularidad y notoriedad.
Asociación cultural. El clarín también evoca la idea de un llamamiento a la atención, lo que se alinea con la intención del autor de provocar reflexión y crítica a través de su escritura.