Perífrasis. Etimología y significado
La perífrasis, un recurso lingüístico de gran versatilidad, tiene sus raíces en el latín periphrasis, término que los gramáticos y retóricos adoptaron del griego περίφρασις (períphrasis). Esta palabra, utilizada ya por Quintiliano en el siglo I d.C., se compone de περί- (alrededor) y φράζω (explicar), reflejando así su esencia: expresar algo mediante un rodeo de palabras.
El diccionario oficial define la perífrasis verbal como Unidad predicativa constituida generalmente por un verbo auxiliar en forma personal y un verbo auxiliado en forma no personal.
En el ámbito gramatical es una herramienta fundamental del español, enriqueciendo la expresión y precisando significados. Estas construcciones sintácticas, formadas por dos o más verbos, funcionan como una unidad semántica, aportando diversos matices de tiempo, aspecto, modo o intención a la acción expresada.
Estructura y función de la perífrasis verbal
La estructura típica consta de un verbo auxiliar conjugado y un verbo principal en forma no personal (infinitivo, gerundio o participio), a menudo unidos por una preposición o conjunción. Esta combinación permite expresar una amplia gama de matices que los tiempos verbales simples no pueden transmitir por sí mismos.
El español cuenta con una riqueza impresionante de perífrasis verbales, estimándose en más de 130 combinaciones posibles. Entre las más utilizadas se encuentran ir a + infinitivo para expresar futuro inmediato, estar + gerundio para acciones en desarrollo y tener que + infinitivo para denotar obligación.
Un aspecto interesante de las perífrasis es cómo pueden combinarse para crear significados aún más definidos. Por ejemplo, la expresión coloquial me voy a ir yendo combina dos perífrasis verbales (ir a + infinitivo y ir + gerundio) con el verbo pronominal irse para enfatizar la inminencia, la gradualidad y la acción reflexiva de marcharse. La construcción ir a + infinitivo expresa futuro inmediato, mientras que ir + gerundio indica una acción progresiva y el verbo pronominal irse aporta el matiz reflexivo de la acción de partir.
Ejemplos de uso
- Acabo de llegar (perífrasis de aspecto perfecto reciente). Indica una acción recién completada.
- Vengo diciendo esto desde hace años (de aspecto reiterativo). Expresa una acción que se repite a lo largo del tiempo.
- Hay que estudiar más (perífrasis de obligación impersonal). Denota una necesidad u obligación general.
- Echó a correr (incoativa). Señala el inicio repentino de una acción.
- Llevo escritas diez páginas (perífrasis resultativa). Muestra el resultado acumulado de una acción.
Perífrasis verbales. Corolario
Las perífrasis no solo enriquecen el lenguaje cotidiano, sino que también son cruciales en la literatura y la retórica, permitiendo a los hablantes y escritores expresar ideas complejas con mayor precisión y elegancia. Desde indicar el inicio de una acción con ponerse a + infinitivo, hasta señalar su continuidad con seguir + gerundio, estas construcciones ofrecen un abanico de posibilidades expresivas.
En conclusión, las perífrasis verbales son mucho más que simples construcciones gramaticales; son herramientas lingüísticas que reflejan la riqueza y complejidad del pensamiento humano. Su estudio y dominio no solo mejora la competencia lingüística, sino que también abre puertas a una expresión más matizada y precisa, tanto en el español cotidiano como en sus formas más elaboradas.