¿Quién fue el último ocupante de la silla Z de la RAE antes del actual, José Luis Gómez?
Francisco Ayala. Semblanza
Francisco Ayala nació en Granada el 16 de marzo de 1906. Su infancia transcurrió en un ambiente familiar que le permitió acceder a una sólida formación intelectual. Desde muy joven mostró inclinación por la literatura y el pensamiento crítico, lo que lo llevó a colaborar en revistas culturales como Revista de Occidente, donde se vinculó con la tertulia de Ortega y Gasset. Tras licenciarse y doctorarse en Derecho en la Universidad de Madrid, amplió estudios en Berlín gracias a una beca, experiencia que lo abrió al pensamiento europeo y a la sociología emergente.
Ayala fue un hombre de temperamento reflexivo y escritura precisa, capaz de unir la mirada del jurista con la sensibilidad del narrador. Su vida personal estuvo marcada por la experiencia del exilio y por una constante vocación docente, que lo convirtió en maestro de generaciones en América y España.
Actividad profesional
Su carrera académica comenzó en España con la obtención de la cátedra de Derecho Político en la Universidad de La Laguna en 1932. Durante la Guerra Civil sirvió como funcionario de la República, con tareas diplomáticas en la legación de España en Praga. Tras la derrota republicana, se exilió en Buenos Aires, donde fundó la revista Realidad en 1947 y se volcó en la docencia universitaria. Posteriormente, en Puerto Rico, dirigió la Editorial Universitaria y creó la revista La Torre.
Su itinerario académico lo llevó por universidades de gran prestigio: enseñó sociología y literatura en Río de Janeiro, Puerto Rico, Rutgers, Princeton, Chicago y Nueva York, entre otras. Esta trayectoria internacional consolidó su perfil como intelectual de alcance global, capaz de dialogar con la tradición europea y con la modernidad americana.
En paralelo, desarrolló una obra literaria extensa y variada, que abarca desde relatos y novelas hasta ensayos y estudios literarios. Títulos como Muertes de perro (1958), El fondo del vaso (1962) o El jardín de las delicias (1971) muestran su capacidad para analizar la condición humana con ironía y rigor.
Francisco Ayala en la RAE
Ayala regresó definitivamente a España en 1976, ya jubilado de su actividad docente en Estados Unidos. Ocho años más tarde, el 25 de noviembre de 1984, tomó posesión como académico de número de la Real Academia Española con un discurso titulado La retórica del periodismo, al que respondió Rafael Lapesa en nombre de la corporación.
Desde entonces y hasta su muerte el 3 de noviembre de 2009, ocupó la silla Z.
Su labor en la RAE se prolongó durante veinticinco años, en los que aportó una visión crítica y actualizada sobre el lenguaje y la sociedad. Como recordó Darío Villanueva, Ayala sorprendía por la rigurosa actualidad de sus enfoques, siempre atentos a los problemas políticos, sociales y culturales del día a día. Su escritura, ajustada y precisa, se convirtió en modelo de claridad y compromiso intelectual.
La Academia reconoció su legado con ediciones conmemorativas, como la publicación especial de Muertes de perro en 2014, y con la edición facsimilar de Historia de macacos presentada en el Congreso Internacional de la Lengua Española de 2016.
Corolario
Francisco Ayala falleció en Madrid el 3 de noviembre de 2009, a los 103 años. Su vida, marcada por el exilio y el regreso, por la docencia y la creación literaria, fue un ejemplo de intelectual comprometido con su tiempo.
En la Real Academia Española dejó la huella de una conciencia siempre viva, capaz de unir la tradición con la modernidad y de mostrar que la palabra, cuando se ejerce con rigor, es también una forma de responsabilidad histórica.




