Exordio
¡Nada, nada, que nuestros políticos trabajan! Bueno, igual me he pasado… Pero es cierto que parece ser que, por fin, las pruebas de acceso a la Universidad van a ser unitarias a nivel nacional a partir de ahora. Y les han cambiado de nombre, ya se llama PAU, que no es paz ni Pablo en catalán…
Lo mejor es que desde las próximas pruebas, las faltas de ortografía y de cohesión en las respuestas restarán puntos de cara a la calificación final. Y eso era muy necesario pero ¿quién será el maestro que los corrija? ¿Dominará la ortografía lo suficiente como para saber lo que está bien y lo que está mal? ¡Quién sabe! Vean, vean la fotografía.
¿Por qué no da igual?
¿Confiaría usted en un arquitecto que no sepa interpretar un plano? ¿Y en un médico que no sepa dónde está la aorta? ¿En un político mentiroso? No respondan a esto último, a lo anterior sí.
Y si no confían en esas gentes ¿por qué hacerlo en un colegio que edita cartelería con graves faltas ortográficas? ¿No debían ser ellos, precisamente, los que tuvieran un celo especialísimo en la corrección?
Ya explicamos en ¡Tildes! las razones por las que la ortografía y, por lo tanto, la acentuación gráfica, no es asunto baladí. Y, desde luego, claro que no da igual.
Las claves
Veamos el cartel en cuestión. En principio carece de interés para el público ajeno al colegio, como es nuestro caso, pero solo mirándolo por encima nos damos cuenta de algo muy grave: omiten la tilde a la palabra música y queda así: musica (del verbo musicar, quizás). Luego nos da por pensar y puede que sea otra cosa, que se refieran al juego del mus en femenino (que el lenguaje pretendidamente inclusivo no ceja) y con el diminutivo más propio de Aragón: una partidica de musica.
¿Es eso lo peor? No sé, porque cuando veo que tampoco saben escribir bien el nombre de su propio colegio, el alma se me cae a los pies mientras me pregunto si de verdad nos merecemos esto. ¿Florían? ¿Llaman Florían al gran Florián Rey, una personalidad nacida en el mismo municipio del colegio que perpetra este cartel? ¿De verdad pone Florían o son mis sentidos los que me engañan?
El que no sepan que el símbolo del euro debe ponerse separado de la cantidad, es peccata minuta comparado con lo anterior, pero no, yo no confiaría en un colegio que presente cartelería con graves faltas. Aunque ¿y si todos son del mismo estilo? Eso es lo preocupante porque creo que la respuesta es afirmativa. O sea, lo más negativo posible.