Exordio
Como muy bien saben Sánchez y sus prebostes adláteres, la memoria es algo íntimo, subjetivo e inalienable. Lo saben porque es de cajón aunque impongan una memoria colectiva -y falsa- precisamente por el afán global del sometimiento y la prohibición del libre pensamiento de la plebe. En hablarydecir, y en la modesta medida que seamos capaces, estaremos siempre batallando por la libertad, por supuesto.
Al asunto: es la memoria, lo que me lleva a recordar los tiempos de la sicodelia (también con una p delante). Y es esa memoria personal en lo que nos fundamentos para que los más jóvenes sepan que no todos los tiempos fueron iguales.
Sicodélico. Etimología
La palabra sicodélico es una adaptación al español del inglés psychedelia. Es un neologismo formado a partir de las palabras griegas ψυχή (psychḗ), que significa alma, y δηλόω (dēlóō), que quiere decir manifestar. Fue inventada por el psicólogo británico Humphry Osmond y significa textualmente algo así como lo que manifiesta el alma.
Significado de sicodélico
Tres acepciones nos ofrece el diccionario oficial de la RAE:
. Perteneciente o relativo a la sicodelia.
. Dicho especialmente de drogas como la marihuana y otros alucinógenos: Causantes de la manifestación o estimulación de potencias o elementos psíquicos que en condiciones normales están ocultos.
. Raro, extravagante, fuera de lo normal.
Esta última, para tener sentido, debe referirse a lo que es extravagante, con propiedades similares a las que producen las alucinaciones por cualquier vía.
Sicodélico. Usos
Se utiliza para describir un estado provocado por la ingestión de ciertas sustancias alucinógenas, así como lo que se manifiesta a través de una alteración de los elementos psíquicos usualmente ocultos. También para referirse a algo extravagante con propiedades similares a las que causan alucinaciones, como acabamos de ver. En el ámbito de la música, se relaciona con una amplia variedad de estilos influenciados por la psicodelia de los años sesenta, una subcultura que experimentaba con drogas psicodélicas para vivir alucinaciones visuales y auditivas.
¡Ojo! Aviso a navegantes: no es necesaria la ingestión de drogas para experimentar la sicodelia, simplemente con permanecer en un ambiente así es más que suficiente, y apelo no solo a mi experiencia, sino también a la definición oficial de sicodelia: Tendencia surgida en la década de 1960, caracterizada por la excitación extrema de los sentidos, estimulados por drogas alucinógenas, música estridente, luces de colores cambiantes, etc. Así, drogas, claro, pero también música, luces y un importante etcétera que señala la propia RAE y que abre otras puertas.
En la música
El término sicodélico se utiliza para describir un género de música que se originó en la década de 1960. La música sicodélica se caracteriza por letras surrealistas, efectos de sonido experimentales y una mezcla de influencias musicales. Algunos de los artistas más famosos de este género son Los Beatles, Pink Floyd y Jimi Hendrix.
En el arte
El arte sicodélico es conocido por sus colores brillantes y diseños abstractos que intentan replicar o evocar las alucinaciones experimentadas por los usuarios de drogas sicodélicas. Este estilo de arte se hizo popular en la década de 1960 y a menudo se asocia con la contracultura de la época. Víctor Moscoso, Wes Wilson y Peter Max son los ejemplos más prominentes del arte de la sicodelia.
En la moda
La moda sicodélica se caracteriza por colores brillantes, patrones abstractos y una estética generalmente fuera de este mundo. Esta tendencia también surgió en la década de 1960 y todavía se puede ver en ciertos subgéneros de la moda hoy en día. Entre sus más destacados representantes citamos a Emilio Pucci, Yves Saint Laurent y Miuccia Prada.
¿Y en literatura?
Decenas de ejemplos hay de escritores, digamos, sicodélicos: William S. Burroughs, Allen Ginsberg, Carlos Castaneda, Timothy Leary, Ken Kesey, Anaïs Nin, Jack Kerouac, Hunter S. Thompson,…
Curiosidades
El arte psicodélico, también conocido como arte lisérgico, contempla las expresiones artísticas que surgen a partir de la utilización de drogas psicodélicas, entre las que se encuentran el peyote y el LSD. La persona, que puede ser un músico, un pintor, un escritor u otra clase de artista, busca volcar su universo interior en sus obras. La psicodelia es uno de los componentes más notorios de la contracultura, pues ofrece una vía de escape de los límites impuestos a la conciencia y a la vida diaria por el sistema dominante.