Quizá ya lo sabía pero no. Los vuelos de aviones son curvos y no rectos debido a varios factores como la forma de la Tierra y la eficiencia:
- Curvatura de la Tierra. La Tierra es esférica, por lo que la distancia más corta entre dos puntos no es una línea recta, sino un arco llamado ruta del gran círculo. Esta ruta parece curva en un mapa plano, pero es la más eficiente en la superficie terrestre.
- Eficiencia de combustible. Las rutas curvas permiten aprovechar la menor circunferencia de la Tierra en latitudes más altas, lo que resulta en un ahorro de tiempo y combustible.
- Condiciones climáticas. Los pilotos ajustan las rutas para evitar turbulencias, tormentas y aprovechar vientos favorables como las corrientes en chorro, que pueden alcanzar velocidades de hasta 322 km/h.
- Gestión del tráfico aéreo. Las rutas curvas ayudan a coordinar el flujo de miles de vuelos simultáneos, evitando colisiones y manteniendo un tráfico aéreo ordenado.
- Restricciones del espacio aéreo. Algunos países tienen restricciones o zonas prohibidas que los aviones deben evitar, lo que puede resultar en rutas curvas.
Así, las rutas curvas son más eficientes, seguras, rápidas y prácticas. Y es que siguen el gran círculo terrestre, aprovechan corrientes en chorro y optimizan la eficiencia aerodinámica, maximizando la distancia recorrida por unidad de combustible consumido.