Exordio
Vean bien la foto, por favor: se trata de una calle que ‘posee’ más de 14 kilómetros de extensión. Ahí es nada, pero no por la longitud sino por la capacidad de poseer. ¿Dónde está publicada semejante barbaridad? En un medio de prensa (no es de información sino de los subvencionados afines al poder) de Aragón.
¿Recuerdan ustedes cuando los periodistas eran seres humanos que dominaban el arte de la expresión y de la escritura? ¿Recuerdan, acaso, que entonces había, además, una figura que les protegía de algún desmán: el corrector? Y quizás recuerden también esos tiempos en los que el director y el jefe de cierre de los periódicos leían y aprobaban todo lo que iba a publicarse. Pues ahora, nada de eso, ya lo ven.
¿Tener y poseer son sinónimos?
Ya perdonarán ustedes que plantee esta pregunta porque la respuesta no es nada difícil salvo que se le haga a un periodista con ganas de parecer culto a costa de demostrar su incultura.
Pues claro que lo son, pero no siempre. Ocho acepciones tiene el verbo poseer en el diccionario oficial de la RAE y en solo dos puede intuirse que se referencie a una cosa. Dicho de una persona o de una cosa: Tener algo en su interior o formando parte de ellas (segunda acepción) y dicho de una cosa: Tener una influencia poderosa sobre alguien (tercera). Respecto al resto, ninguna persona podría ni siquiera dudar que una cosa posea algo.
Veinticinco son las acepciones de tener en el diccionario y una de ellas, la cuarta, dice: Contener o comprender en sí. Y como sinónimos de esta acepción cita a contener, encerrar, guardar, incluir, comprender, englobar, abarcar y albergar.
Tener y poseer. ¿Es más culto decir poseer que tener?
Discúlpenme también por esta pregunta que, por supuesto, no va dirigida a ustedes sino que la utilizo solo retóricamente y no como sofistería. Hay un refrán español por todos conocido que dice: Dime de qué presumes y te diré de qué careces. Aquí está la clave. Como ya he citado anteriormente, cuando alguien quiere demostrar algo que no es normalmente demuestra lo que es. En mi opinión, es mucho mejor utilizar bien un vocabulario de 300 palabras que hacerlo fatal con otro de 3.000; es más culto el primero, más que nada porque sabe lo que dice.
Corolario
Quizás haya quienes crean que por un error no hay que crucificar a nadie, y tienen razón. La cuestión es que no es un error, aquí solo demuestro un ejemplo, pero los hay a patadas. ¿Por qué? Porque hay cosas que ya no importan, como la corrección, y, desgraciadamente, no me refiero solo a la gramatical y a la ortográfica.
Y estamos hablando de profesionales de la palabra que no saben usar las palabras. Y fondo sin formas es barbarie tanto como formas sin fondo es estupidez.