Exordio
No, no nos estamos disculpando por nada, aunque quizás tengamos sobrados motivos para hacerlo. O no porque hablarydecir es un lugar de libertad sin corsés. Y por esa razón vamos a criticar un rótulo que se ve en cualquier lugar del mundo donde se hable español (donde se hablan otras lenguas probablemente también lo pondrán, adaptado, eso sí).
Disculpen las molestias. Uso y abuso
El uso y abuso de rótulos como Disculpen las molestias en establecimientos comerciales y centros oficiales es un fenómeno que merece un análisis crítico. Estos carteles, aparentemente inofensivos, a menudo revelan más de lo que pretenden ocultar.
En primer lugar, la ubicuidad de estos rótulos ha diluido su significado original. Lo que debería ser una disculpa sincera por una inconveniencia temporal se ha convertido en un cliché vacío de fondo, en un formalismo que vale para todo. Los clientes y ciudadanos se encuentran tan acostumbrados a verlos que apenas registran su presencia y, mucho menos, su mensaje. Este desgaste del lenguaje lleva a una desconexión emocional entre la institución y el usuario, ya que la repetición de estas frases genera una sensación de indiferencia.
El escudo burocrático: Disculpen las molestias
Además, estos carteles pueden ser vistos como una forma de evasión de responsabilidad. En lugar de ofrecer explicaciones claras o soluciones concretas, las empresas y organismos se escudan tras una frase genérica. Esto genera frustración en los usuarios que se percatan (tampoco hay muchos), que se sienten ignorados o menospreciados. La falta de información adicional sobre la naturaleza del problema o el tiempo estimado para su resolución puede intensificar esta frustración.
Más allá
El uso excesivo de estos rótulos suele indicar problemas en la gestión o la planificación. Si un establecimiento necesita disculparse constantemente, quizás debería replantearse sus procesos y su atención al cliente. La repetición de Disculpen las molestias es, en general, un indicativo de fallos sistemáticos que requieren atención urgente.
Sin embargo, cuando se utilizan de manera apropiada y franca, estos carteles pueden ser una herramienta útil de comunicación. Un Disculpen las molestias ocasional y oportuno es aceptable si va acompañado de un esfuerzo por resolver los contratiempos y mantener informados a los usuarios. El problema surge cuando se convierten en un sustituto de la verdadera atención al cliente y la resolución efectiva de problemas.
Versión china
Dixculpa molestias o Disculparr molestias son dos versiones chinas sobre la expresión vacía que tratamos hoy. Al menos en estos casos se nos escapa una sonrisa: aunque no haya conocimiento hay voluntad. Y también mimetismo con respecto a los colegas españoles…