Ojalá fuera la mía la última sangre española que se vertiera en discordias civiles. Ojalá encontrara ya en paz el pueblo español, tan rico en buenas cualidades entrañables, la Patria, el Pan y la Justicia. José Antonio Primo de Rivera
Sobre España en paz
Incorporamos hoy a nuestras Citas una frase tan sonora como noble: Ojalá fuera la mía la última sangre española que se vertiera en discordias civiles. Ojalá encontrara ya en paz el pueblo español, tan rico en buenas cualidades entrañables, la Patria, el Pan y la Justicia es una de las más conocidas y citadas de José Antonio Primo de Rivera, especialmente por el mensaje de reconciliación y esperanza que transmite en un contexto de gran violencia y división social.
José Antonio expresa el deseo de que su propio sacrificio personal, en un momento de enfrentamiento civil, sirva para poner fin al derramamiento de sangre entre compatriotas. Lejos de incitar al odio o a la venganza, su mensaje es de superación de las diferencias y de búsqueda de un futuro común basado en la paz, la justicia social y el bienestar de todos los españoles. La mención a la Patria, el Pan y la Justicia resume los ideales que defendía: una España unida, donde nadie carezca de lo necesario y donde reine la equidad.
Esta frase, cargada de dramatismo y humanidad, muestra la nobleza y generosidad de José Antonio, quien, a pesar de las circunstancias, antepone el bien de España y de sus gentes a cualquier interés personal o partidista. Su legado, reflejado en palabras como estas, invita a la reflexión sobre la importancia de la concordia y el entendimiento en tiempos de crisis.
¡España en paz. Un ejemplo!
José Antonio. Semblanza
José Antonio Primo de Rivera fue una figura de gran talla intelectual y moral en la historia contemporánea de España. Fundador de la Falange Española, supo aunar en su pensamiento la pasión por la justicia social con un profundo amor a la patria, defendiendo siempre la dignidad del ser humano y la necesidad de superar las divisiones que desgarraban la nación. Hombre de verbo brillante y de acción decidida, José Antonio encarnó el idealismo de una generación que aspiraba a una España unida, justa y solidaria. Su vida y su muerte prematura, marcadas por la coherencia entre sus ideas y sus actos, le han convertido en símbolo de entrega y sacrificio por el bien común. Su legado, impregnado de valores de reconciliación, justicia y esperanza, sigue inspirando a quienes buscan una España mejor, guiada por la concordia y el respeto mutuo.
¿Algún hipoprogre por ahí para rebuznar?