Pedro Poveda Castroverde nació el 3 de diciembre de 1874 en Linares (Jaén), en una España marcada por la crisis del 98 y el declive del imperio.
Su vocación sacerdotal surgió temprano y tras estudios en Jaén, Baeza y Guadix, fue ordenado sacerdote en 1897. Desde sus primeros años mostró una sensibilidad especial hacia los más pobres, especialmente los niños de barrios marginales.
Compromiso educativo
Inspirado por el modelo del Padre Manjón, Poveda entendía que la educación era la clave para combatir la pobreza y la exclusión. En Guadix, fundó las Escuelas del Sagrado Corazón para niños de la calle, conocidos como golfos. Sin embargo, su labor fue mal vista por sectores conservadores, lo que lo obligó a abandonar la ciudad.
En Covadonga (Asturias), continuó su labor pedagógica, fundando academias para maestros y estudiantes. En 1911, creó la Institución Teresiana, una asociación laical que promovía la formación cristiana y cultural, especialmente entre mujeres. Esta obra fue aprobada por el Papa Pío XI en 1924 y se expandió internacionalmente.
San Pedro de Poveda. Vida personal
Fue un hombre de profunda fe, devoto de la Virgen del Carmen, cuyo escapulario llevaba incluso en el momento de su muerte. Su espiritualidad se reflejaba en su compromiso con la justicia social, la dignidad humana y la formación integral. Era cercano, firme y profundamente convencido de su misión.
San Pedro de Poveda. Martirio en la Guerra Civil
El 27 de julio de 1936, en los primeros días de la Guerra Civil Española, fue detenido en su casa de Madrid por milicianos republicanos. Al ser interrogado, respondió: Soy ministro del Señor. Su hermano Carlos lo acompañó brevemente antes de ser separado. Pedro le dijo: Dios me quiere fundador y mártir; tú, sálvate.
Al día siguiente, 28 de julio, fue ejecutado a bocajarro. Una de las balas atravesó el escapulario de la Virgen que llevaba al pecho. Fue asesinado por odio a la fe, en un contexto de persecución religiosa que afectó a decenas de miles de ciudadanos católicos, sacerdotes y religiosos en España.
Canonización y legado
Fue canonizado por San Juan Pablo II el 4 de mayo de 2003 en Madrid. Hoy, la Institución Teresiana está presente en más de 30 países y su figura es reconocida como pedagogo, fundador y mártir de nuestro tiempo
¿Por qué contar su historia?
Porque no se puede entender la historia de la educación cristiana en España sin Pedro Poveda. Porque su martirio no fue solo una tragedia, sino también un testimonio. Y porque su vida muestra que la fe, la cultura y la justicia pueden caminar juntas, incluso en tiempos de violencia.
¿O esto no es memoria, Ángel Víctor Torres?