Entre rabasón y sanselo

agosto 13, 2024

Insultos en español: entre rabasón y sanselo

Comenzaremos por un rabasón y acabaremos con el sanselo de turno y así, continuamos en Insultos certeros en español con este diccionario que tanto está gustando a nuestros lectores. Y ya saben que no, ni es exclusivo ni excluyente.

Les proponemos un juego: intenten poner cara (si es conocida, mejor, pero si no lo es, vale igual) a cada uno de los siguientes insultos. Quien lo consiga y nos lo haga saber en hablarydecir@gmail.com será obsequiado con una gorra veraniega de hablarydecir, claro. Ale, que usted puede…

Y ya, ya vamos, aquí están los insultos comprendidos entre el rabasón y el sanselo:

Rabasón: Es un rechoncho al que ignora la RAE.
Rabiolis: Así, con B, todo un cascarrabias.
Raboso: Astuto.
Racalla: Morralla.

Rajabroqueles: Valentón que se jacta de pendenciero y guapo. Y ni lo es ni se aproxima.
Rapazudo: Pequñajo y gordito. Rechoncho.
Rapiezo: Malo, travieso.
Rarucio: Échele una sola gota de imaginación y sabrá qué es.
Rastacuero: Por fin uno que se sabe la RAE… Vividor, advenedizo. O inculto, rico y jactancioso todo a la vez.
Rastrapajo: Esas gentes que no están en condicones para nada
Rastrero: Que actúa de forma despreciable o innoble para conseguir sus propósitos, a costa muchas veces de la propia humillación.
Rebañasandías: Los que hacen lo que nadie quiere hacer, interprételo usted como mejor guste.
Rebolisero: Presumido y derrochador.
Rebordenco: Groserazo, pero de los gordos.
Refitolero: Cotilla, fisgón.
Regodón: Enclenque, a falta de desarrollarse.
Rehogado: Aún le faltan algunos hervores pero no lo sabe.
Repelente: El niño Vicente, con perdón. Marisabidillo.

Repipi: Pedante, repelente.
Retoliquero: Personaje que repite mucho lo que dice, que sermonea mucho.
Retrasado: Que no tiene el desarrollo mental corriente.
Revientabaúles: Como no sabe abrirlos…
Ríeleches: Esos insoportables que mantienen siempre una risa falsa.
Robaperas: Individuo de poca valía que comete faltas de escasa importancia.
Romancero: Protestón, cascarrabias. La RAE lo sabe, pero poco.
Roñoso: Tacaño, avaro. Y, por decirlo todo, miserable.
Rufián: Ante este o esto, optaré por callar.
Ruin: Persona mezquina, avarienta, de malas costumbres y procedimientos.
Rústico: Violento, rudo, carente de miramiento y civilidad.
Sabanazas: Descuidado en las formas de actuar y de vestir.
Sabandija: Persona despreciable, inquieta y molesta.
Sabelastodas: Listillos, sabelotodos.
Sabelotodo: Persona que presume de sabia sin serlo. Repipi.
Sablista: Que tiene por hábito sablear.
Sacacuartos: No piensen mucho…
Sacadineros: Más de lo mismo.
Sacamuelas: Aquí hay mucha variedad…
Saíno: Además de lo que dice la RAE, seboso.
Salamandrán: Dejado, desgarbado, descuidado.
Salsirote: Loco incurable pero también enloquecido de repente.
Samarugo: Torpe, introvertido, todo un zote como Dios manda.
Samugo: Terco y poco locuaz.
Samugón: Este también es poco locuaz, además de cargante y pegajoso.
Sandio: Melón, necio, simple, majadero,…
Sanguijuela: Persona que va poco a poco sacando a alguien el dinero, alhajas y otras cosas.
Sanselo: Soso, pero al cubo, por lo menos.

NOTA: No dejen de estar atentos a la próxima entrega, que esto ya se está acabando… Y no olviden que les hemos hecho un desafío en Entre rabasón y sanselo.

Entre rabasón y sanselo

Artículos relacionados

Aquí hay secuaces

Aquí hay secuaces

Los insultos certeros no buscan humillar, sino revelar una verdad incómoda con precisión. Son breves, justos y memorables porque nombran lo que el otro preferiría ocultar. El insulto secuaz encierra más que una simple acusación de obediencia ciega: revela una...

leer más
Anatomía de un sieso

Anatomía de un sieso

El insulto, cuando es certero, no necesita elevar la voz ni recurrir a la grosería. Basta una palabra bien colocada, con historia, con filo, con intención. En esta serie de minitratados, analizamos insultos que no solo hieren: también enseñan, retratan y, a veces,...

leer más
Sonajas

Sonajas

Los insultos certeros, lejos de ser simples exabruptos, son artefactos lingüísticos cargados de intención, ritmo y contexto. No nacen para herir sin más, sino para señalar con precisión quirúrgica aquello que merece ser nombrado con desdén. Este tratado no celebra la...

leer más