Exordio
Sé que muchas personas temen a ciertas palabras, especialmente las relativas a algo que es inexorable: la muerte. En hablarydecir, no, al contrario, creemos que conocer ciertos aspectos ni nos acerca ni nos aleja del tránsito que todos tenemos pendiente.
Este vocablo no está en desuso y suponemos que nunca lo estará pero sí parece que es una palabra de esas que decimos de carretilla, sin pensar en su significado y, mucho menos, en sus orígenes. Es decir, que sale como un automatismo. De eso vamos a tratar:
Finado. Etimología
La palabra finado proviene del latín finātus, que es el participio pasado del verbo fināre, que significa terminar o finalizar. Este verbo deriva de finis, que significa final o límite. Por lo tanto, finado literalmente se traduce como finalizado o terminado, refiriéndose a alguien que ha llegado al final de su vida.
Sin embargo, curiosamente, nunca se usa como participio (ha finado Pepe) sino solo como sustantivo (el finado reposa en el tanatorio). Por cierto ¿se han dado cuenta de que cuando perece alguien cercano siempre decimos ha fallecido y cuando el finado nos es ajeno usamos ha muerto? Quizás tratemos de este asunto en otro momento.
Significado de finado
La fuente principal (pero no exclusiva) para saber el significado concreto de una palabra es, lógicamente, el diccionario de la RAE. Veamos qué dice al respecto.
En primer lugar aclara que finado es el participio del verbo finar para continuar diciendo que es un eufemismo que puede usarse tanto en femenino como en masculino. A la hora del significado propiamente dicho, el diccionario es escueto: persona muerta, sin más. Muerto, difunto, cadáver y fiambre son los sinónimos que cita y solo expone vivo como antónimo.
Finado. Usos
El uso de finado se remonta a la época medieval y ha perdurado hasta nuestros días. En la Edad Media, ya era común en documentos legales y religiosos para referirse a los fallecidos. Con el tiempo, su uso se ha mantenido en contextos formales y ceremoniales, aunque ha sido reemplazado en gran medida por otros términos más modernos en el lenguaje cotidiano.
Históricamente, finado ha sido utilizado en contextos formales y literarios para referirse a una persona fallecida. Aunque su uso ha disminuido en el lenguaje cotidiano, sigue siendo común en documentos legales y en ciertos contextos culturales y religiosos. En la actualidad, términos como fallecido o difunto son más comunes en el habla diaria.
Finados en la cultura popular
En Canarias, la tradición de Los Finados o Finaos es una celebración que tiene lugar entre el 31 de octubre y el 2 de noviembre, coincidiendo con el Día de Todos los Santos. Sin embargo, en la actualidad, se ha adaptado para coincidir con la víspera de Todos los Santos (del 31 de octubre al 1 de noviembre), aprovechando que es un día no laborable. Durante esta festividad, las familias se reúnen para recordar a sus difuntos, encendiendo velas y compartiendo historias sobre ellos. Esta tradición incluye elementos como el consumo de castañas asadas y la realización de encuentros de música tradicional. Lamentablemente, y a mi entender causado por el papanatismo con Halloween, la tradición canaria se está comenzando a perder.
Otros ritos relacionados con los finados en el ámbito hispanohablante son: Día de los Muertos en México, Novenario en Guatemala, Velación en Colombia, Entierro en el mar en Chile, Ofrenda de Todos los Santos en Perú, Fiesta de los Finados en Ecuador, Velorio de Angelitos en Argentina, Despedida del Alma en Bolivia, Misa de Réquiem en Venezuela, Procesión de las Ánimas en Nicaragua, Velación de los Difuntos en El Salvador, Culto a los Ancestros en Honduras, Ceremonia de Purificación en Paraguay, Fiesta de los Muertos en Uruguay, Velorio de los Santos en Costa Rica, Ofrenda de los Muertos en Panamá, Velorio de los Difuntos en Cuba y Novenario de los Muertos en República Dominicana.