Exordio
Comenzamos en julio esta serie de curiosidades sobre idiomas minoritarios. Lo hicimos con el húngaro y seguimos con el polaco, nahua, checo, quechua, portugués. Después abordamos las palabras de origen escandinavo, las turcas, las japonesas y las rusas. Ahora vamos con el lunfardo…
Lunfardo. Etimología
La palabra lunfardo tiene su origen en el término lombardo, proveniente del idioma hablado en la región de Lombardía, en el norte de Italia. Esta etimología se remonta a una larga tradición europea, donde los lombardos, al convertirse en los primeros banqueros y prestamistas, eran considerados por el resto de la sociedad como estafadores o ladrones.
La evolución del término se puede trazar de la siguiente manera:
- En el siglo XIV, la literatura italiana, como El Decamerón, ya utilizaba lombardo para referirse a una persona poco confiable o estafadora.
- En el siglo XIX, en Roma, la palabra lombardo se usaba con el sentido de ladrón.
- En el contexto rioplatense, la palabra sufrió una transformación fonética. Cuando los inmigrantes italianos exclamaban E un lombardo (Es un lombardo) para referirse a alguien que cometía una fechoría, la pronunciación se deformó gradualmente hasta convertirse en lunfardo.
- La primera aparición documentada del término lumbardo (una variante intermedia) se encuentra en la obra Los amores de Giacumina (1886), donde se utiliza para referirse a personajes de dudosa reputación.
Esta evolución lingüística refleja cómo una palabra originalmente utilizada para designar a los habitantes de una región italiana llegó a ser sinónimo de ladrón y, finalmente, dio nombre a una jerga popular desarrollada en el Río de la Plata.
Lunfardo. Características y usos
Es una jerga popular originada en el Río de la Plata, principalmente en Buenos Aires, Montevideo y ciudades cercanas como Rosario, La Plata y Santa Fe, a finales del siglo XIX y principios del XX. Surgió inicialmente entre las clases bajas y se desarrolló con la llegada masiva de inmigrantes europeos, especialmente italianos y españoles.
El lunfardo funciona como un argot o léxico popular urbano, común en grandes ciudades.
Vocabulario distintivo: Incluye palabras y expresiones no registradas en diccionarios de español convencionales.
Evolución lingüística: Inicialmente usado por delincuentes, se extendió a todos los estratos sociales.
Influencia cultural: Se incorporó a la literatura, poesía y, notablemente, al tango.
Mezcla lingüística: Combina elementos del cocoliche, alteración de sílabas, habla gauchesca y términos de lenguas aborígenes como guaraní y quechua.
Formación y estructura:
- Connotación: Emplea palabras con significados desplazados del español estándar, creando metáforas.
- Verbos: En lunfardo, los verbos solo se conjugan en -ar.
- Sustento léxico: Utiliza recursos como la metonimia y la derivación de palabras.
Ejemplos de uso
- Este bacán nunca laburó: siempre la pasó joya engrupiendo a minas con mucha guita.
- ¡Sos un atorrante! ¿Cómo les vas a afanar los puchos a un gomía?
- Che, ¿vamos a morfar una pizza? Estoy con un hambre bárbaro.
- No me chamuyes, ya sé que te fuiste de joda anoche.
- El guacho se mandó un moco y ahora está en cana.
El lunfardo ha evolucionado para convertirse en una parte integral del habla coloquial en Argentina y Uruguay, reflejando la rica historia de inmigración y mezcla cultural de la región.
Lunfardismos
Escuetamente, define la RAE al lunfardismo como Palabra o locución propia del lunfardo, pues para muestra aquí van varios botones:
Afanar. Robar. Proviene del antiguo español popular.
Atorrante. Vago, malviviente. Aunque hay varias teorías sobre su origen, probablemente proviene de formas dialectales antiguas usadas tanto en España como en Italia, donde significa pescar con tranquilidad.
Banquina. Arcén.
Bondi. Colectivo o autobús. Viene del brasileñismo bond, que surgió en Río de Janeiro en 1876 y originalmente se refería al tranvía.
Chabón. Tipo, individuo.
Chamuyar. Conversar, hablar con habilidad para persuadir. Proviene del caló.
Chorro. Ladrón. Proviene del romaní ćor, que a su vez viene del sánscrito cora (ladrón).
Fiaca. Desgana, pereza. Del italiano fiacca.
Gil. Tonto o ingenuo.
Groso. Importante, grande. Del portugués grosso, surgió en Brasil en la década de 1980.
Guita. Dinero.
Laburo. Trabajo. Del italiano dialectal lavuro.
Macana. Mentira, disparate.
Morfar. Comer. Del italiano popular morfa (boca).
Pibe. Niño o muchacho joven. Proviene del genovés pivetto.
Quilombo. Lío, desorden. Es un africanismo, del quimbundo, que significa aldea. Originalmente se usaba en Brasil para referirse a las aldeas clandestinas de esclavos fugitivos. También significa burdel y andurrial.
Trucho. Falso o de mala calidad.
Yuta. Policía. Del italiano, forma contracta de yusta, una rioplatenización de la palabra italiana giusta (justa).
Estas palabras son parte del rico vocabulario lunfardo que se ha desarrollado en el Río de la Plata y que continúa evolucionando, con aproximadamente 6,000 términos en uso y unos 70 nuevos cada año.
NOTA 1. Si lo desea, puede consultar la sección completa Son de…
NOTA 2. Recuerden que estamos a su disposición para cuanto deseen comentar en hablar@hablarydecir.com y en hablarydecir@gmail.com